Año nuevo, objetivos nuevos, o dicho de otra manera… propósitos de año nuevo ¿Te suena?

En este artículo voy a hablar de como establecer objetivos 100% reales y alcanzables. Pero… Ojo! No lo vamos a hacer como lo hace mucha gente. Te voy a dar los pasos clave para que esos objetivos se hagan realidad.

Objetivos realistas

Lo más importante, es que aquellos objetivos que te plantees sean realistas y por supuesto alcanzables.

Es mejor un grano de acción que una montaña de intención

¿Qué quiero decir con esto?

Es muy importante tener claro que es lo que quiero lograr y no ponerme objetivos ambiguos. Un ejemplo de objetivo poco claro sería mejorar la salud.

Mejorar la salud ¿es realmente un objetivo? ¿o es aquello que quiero alcanzar?

Una vez que tengo claro qué quiero alcanzar, también es importante pensar para qué quiero lograrlo. ¿Qué beneficios me aporta?

Así será mucho más fácil hacer realidad este objetivo.

Ejemplo:

• Si yo digo «voy a mejorar mi salud», esto es algo muy abstracto ¿Qué acciones a llevar a cabo me pueden ayudar a mejorar mi salud?
  • Comer más frutas y verduras
  • Hacer más ejercicio
  • Comer menos pan
  • Evitar el picoteo
  • Beber más agua…
• ¿Para qué quiero lograr este objetivo?
  • Para mejorar parámetros en la analítica, para tener más resistencia y menos fatiga, para agacharme sin problemas, para recuperar ropa que tengo por el armario….

Pasito a pasito…

Ahora que vamos teniendo las cosas más claras, vamos poco a poco. Cuando queremos hacer muchas acciones a la vez, en gran medida pasa siempre lo mismo… ahí se queda…

Te recomiendo que vayas poco a poco, recuerda «es mejor un grano de acción que una montaña de intención»

Porque no comenzamos eligiendo un par de acciones y según las vayamos alcanzando vamos llevando más acciones a cabo 😉

¿Cómo plantear un objetivo?

Es importantísimo, para que un objetivo sea 100% alcanzable, que lo formulemos correctamente.

Mi truco: META +

• Medible
• Específico
• Temporalizable
• Alcanzable
• Positivo

Vamos a coger 2 acciones de las que hemos planteado anteriormente y vamos a desarrollarlas correctamente.

• Comer más frutas y verduras
• Hacer más ejercicio

Medible

Un objetivo medible es aquel que se puede cuantificar. Debe permitir medir los resultados de forma numérica.

• Comer 3 piezas de fruta y 2 raciones de verduras
• Hacer ejercicio 3 días

Específico

Los objetivos específicos son aquellas que responden al «que», «cuando» y «donde»

• Voy a comer 3 piezas de fruta al día y 2 raciones de verduras al día
  • 1 pieza de fruta en el desayuno, otra a media mañana y otra para merendar
  • 1 ración de verdura en la comida y otra en la cena
• Voy a hacer ejercicio 3 días a la semana
  • Voy a ir a correr 30 minutos
    • Martes
    • Jueves
    • Sábado

Temporalizable

Todo objetivo debe tener una limitación temporal. De esta manera seguramente avances más deprisa y además evitaras que despistarte con tu objetivo.

Mi recomendación: Coge un calendario y marca, semana a semana (vamos a ponernos objetivos a corto plazo) los días en los que sales a hacer ejercicio y los días en el que aumentas el consumo de verduras

• Pon el foco en las cosas positivas que vas logrando 😉

Alcanzable

Un objetivo siempre debe ser alcanzable. Por lo tanto, si yo tengo la intención pero no tengo los recuersos necesarios… estos objetivos no serán realistas ni alcanzables, por lo tanto es importante hacernos una serie de preguntas.

• ¿Tengo frutas y verduras en casa para llevar este objetivo a cabo? ¿Cuándo voy a ir a hacer la compra para no quedarme sin frutas ni verduras en casa?…
• ¿Es viable que vaya a correr 3 días a la semana? ¿Tengo tiempo los días que he planteado? ¿Lo puedo conseguir? ¿Estoy dispuesta a realizar ese esfuerzo?…

Positivo +

En primer lugar, cuando pensamos en la meta que queremos alcanzar, es importantísimo para llegar a ella que hagamos una definición en positivo. Para ello es importante enfocarnos en dónde queremos llegar.

• Ejemplo: No voy a picar entre horas

En realidad, aunque este objetivo tenga buena intención, está formulado de manera negativa y refuerza el verbo picar.

Algo que ayuda a reformular el objetivo en positivo es hacernos preguntas tipo:

• Si no picara entre horas ¿Cómo me sentiría?
• ¿Cómo me sentiría si comiera más saludable?

Reformulamos el objetivo :

• Entre horas, voy a comer fruta y/o yogur, para encontrarme más ligera, más satisfecha y tener una alimentación más saludable.

Lo complicado es cumplirlo

Una vez que hemos visto todos estos pasos, estarás pensando que no es tan complicado llevar los objetivos a cabo… Sí, estás en lo cierto.

Lo complicado es cumplirlo.

Pero al menos hay que intentarlo, y a ser posible disfrutar del proceso y de los pequeños logros que vamos obteniendo día a día.

Vamos a hacer realidad nuestros objetivos

Ahora es el momento de ponerlo todo el práctica. ¡Animo!

¿Dudas? ¿Quieres saber más de este tema o compartir tu experiencia?

Si te apetece puedes escribirme pinchando aquí, estaré encantada de atenderte.

Un abrazo,

Sohaila Sadeq